En Mateo 25 vemos la historia de las diez vírgenes, aquellas que fueron practicas y reaccionar rápidamente ante la venida del novio, con entendimiento y aquellas otras que sin entendimiento, no comprendieron el porque de mantenerse velando.
Tenemos dos caminos, no hay punto medio. O somos INSENSATOS o somos PRUDENTES.
¿Con cuál de las dos opciones se identifica?
El prudente es AGRADECIDO, como aquel único samaritano que volvió del grupo de diez después de ser sanado ( Lucas 17:14-20 ). Entiende que el Reino de los cielos ya está establecido en el mismo presente y según sus actos podría salvarlo o condenarlo. Aunque habrá momentos que padeceremos como Jesús ( v.22-25 ), sabemos que "si el grano de trigo no cae y muere, no da fruto".
La persona PRUDENTE, también es obediente, como aquel ejemplo de Noé, que aún en aquellas locuras que Dios le mandó que hiciese, le obedeció y así salvó su vida. ( v. 26 )
Sabemos que la salvación no es algo colectivo, sino que es personal ( v.33-37 ). Debemos estar atentos ante las señales que ya están y las que vendrán. Porque Dios vendrá como ladrón en la noche, cuando menos lo esperemos.
¿Cómo está su corazón hoy? ¿Esperamos prudentemente o con insensatez?
Dios los bendiga.
Pastor Jorge Grenader.